ALEMANIA Y ESPAÑA DE LA MANO
Foto del día
Los titulares de hoy son la fotografía de la canciller Merkel y Rajoy de la mano en su entrevista en Berlín, con la declaración inicial de Rajoy sobre su antigua amistad. En esas “manitas” se la juega España para influir en el necesario objetivo de equilibrar el centro y la periferia de la UE, conseguir que se aproximen las ventajas y capacidad de crecimiento de los fuertes y de los PIGS, y el objetivo de sustituir el eje franco-alemán, por el cuadrilátero franco-alemán-italo-español.
El segundo se refiere, como no, a la permanente estela de la corrupción política, centrada hoy en los casos multipartidarios de Valencia y Baleares, por un lado y en Andalucía y en el núcleo del PSOE, con Pepe Blanco de protagonista, por otro. A Jaume Matas, parece que se le puede ir identificando con un ladrón de guante blanco, capaz de implicar a un miembro de la familia real en sus asuntos, posiblemente con el objetivo de conseguir cobertura. En el caso de Camps, con todo el respeto a la sentencia absolutoria del jurado popular (por cinco votos contra cuatro, no lo olvidemos), la única rehabilitación posible que le queda es la del olvido, después de las románticas conversaciones, escuchadas universalmente, con uno de los “capos” de la mafia (el “Bigotes”). Por su parte, en Andalucía, el olor a olla podrida, condimentada durante tanto tiempo por la misma cocinera, en este caso el PSOE, desde los albores de la democracia, es cada vez mas profundo e insoportable. Por último, la imputación de José Blanco, impenitente Torquemada del PP en la era Zapatero le va a conducir, inevitablemente, a tener que soportar una interminable cura de su propia medicina, mientras en el seno de su partido, un antiguo Rubalcaba y una nueva?? Chacón afilan sus espadas para el asalto a la Secretaría General.
Comentario aparte merece el asalto judicial a un juez que, independientemente de una hoja de servicios merecedora de estrellas, no casa con la imagen de juez que, por ejemplo, yo mismo conservo de mi abuelo. Debería haber sido político o trapecista, como yo arquitecto o artista, en lugar de ingeniero.